Municipalidad de Puntarenas solicita que UTN devuelva el edificio de la antigua Aduana
El Concejo Municipal aprobó una moción para que el inmueble patrimonial Tobías Vargas Rojas vuelva a manos del cantón y se transforme en un centro que reactive la economía del Paseo de los Turistas

Puntarenas, 3 de junio de 2025.
El edificio Tobías Vargas Rojas, también conocido como la antigua Aduana de Puntarenas, podría volver a manos del pueblo. Así lo acordó el Concejo Municipal al aprobar por unanimidad una moción que solicita a la Universidad Técnica Nacional (UTN) la devolución formal del inmueble, tras el traslado definitivo de sus operaciones al campus en El Roble.
Ubicado al final del Paseo de los Turistas, este emblemático edificio fue construido entre 1936 y 1940 y declarado patrimonio histórico en 2014. Durante años funcionó como aduana nacional, luego como sede del Colegio Universitario de Puntarenas y posteriormente de la UTN. Hoy, el edificio se encuentra cerrado y sin uso, en una de las zonas más turísticas de la ciudad.
“No podemos permitir que este edificio histórico se deteriore mientras el centro de Puntarenas pierde dinamismo. Es momento de recuperarlo para proyectos que realmente beneficien al cantón”, expresó el regidor Mario Rodríguez, proponente de la moción.
La solicitud se fundamenta en el Plan Regulador del distrito primero, que ya contemplaba el traslado de la UTN a El Roble y el destino del inmueble a la Municipalidad. Los regidores coincidieron en que este paso es necesario para activar económica y culturalmente el casco urbano.
Un proyecto con visión estratégica
La propuesta no se limita a la recuperación física del edificio. Rodríguez planteó que el inmueble sea acondicionado como un centro mixto, que albergue servicios públicos, oficinas municipales, comercio local y espacios culturales o turísticos.
Pero fue más allá: propuso que esta zona tenga un régimen fiscal diferenciado que incentive la inversión.
“¿Y si se crea una zona comercial dentro del edificio donde, por ejemplo, durante tres años el IVA sea del 0%? Eso dinamiza el empleo, atrae negocios y genera movimiento en el centro”, propuso.
Además, expuso una visión de mayor alcance: convertir a Puntarenas en Puerto Base para cruceros.
“Este edificio puede formar parte de una estrategia integral para ofrecer servicios e infraestructura que permitan que los cruceros permanezcan más días aquí. Necesitamos locales, zonas seguras, comercio y oficinas al alcance del turismo internacional”, agregó Rodríguez.
En su intervención, el regidor subrayó que la ciudad cuenta con las condiciones logísticas, marítimas y turísticas para recibir más y mejores servicios portuarios, pero que se requiere planificación estratégica y visión a largo plazo.
Historia y futuro en un solo lugar
El edificio lleva el nombre de Tobías Vargas Rojas, exdiputado y figura clave en el impulso a la educación superior en Puntarenas. Fue declarado patrimonio por su valor arquitectónico y simbólico para el desarrollo del cantón.
“No se trata solo de recuperar paredes antiguas. Se trata de devolverle vida a un ícono de Puntarenas que está en el corazón del Paseo de los Turistas, frente al muelle. Es un lugar privilegiado”, afirmó el regidor Gerardo Zúñiga, quien también presentó una moción similar.
Ambas mociones fueron consolidadas y aprobadas en firme bajo el artículo 45 del Código Municipal.
El acuerdo establece que se notificará a la Rectoría de la UTN, al Consejo Universitario, al Ministerio de Cultura y Juventud y a los diputados de la provincia, para gestionar apoyo político y viabilizar el traspaso. También se valora realizar un estudio de factibilidad técnico-financiera para definir el modelo de administración y recuperación del espacio.

Devolver lo que fue del pueblo
Cabe recordar que el nuevo campus universitario de la UTN en El Roble fue construido en un terreno donado por la Municipalidad, con el compromiso tácito de que, una vez terminado el traslado, el edificio original sería devuelto al cantón.
“Ya la Municipalidad donó el terreno donde hoy está la UTN. Lo justo es que ese edificio vuelva al pueblo y no quede abandonado”, concluyó Rodríguez.
Con esta decisión, el Concejo Municipal inicia un proceso histórico de recuperación patrimonial, con la mirada puesta en la economía local, el turismo sostenible y el futuro de Puntarenas como ciudad-puerto.